Adentrémonos en un recorrido por la rica y diversa cultura del café que ha cautivado a millones de personas alrededor del planeta. Conozcamos su historia, las diferentes formas en que se prepara y se disfruta en diversos lugares, y cómo ha dejado su huella en la vida cotidiana de las sociedades.
El café: segunda joya comercial del mundo
Para comenzar, resulta asombroso que el café sea el segundo producto más comercializado en el mundo, justo después del petróleo. Su conocimiento global se debe a los beneficios que ofrece en sus propiedades y cómo distintas culturas lo han adaptado como parte de sus vidas.
De África a la cotidianidad global
Comenzando en África, donde nace el café, encontramos dos variedades fundamentales: el Arábica de Etiopía y el Robusta de África Central. Desde sus orígenes, el café ha formado parte integral de diversos rituales y ceremonias en la sociedad arábiga, siendo preparado con sumo cuidado y llevando hasta varias horas.
Europa, cuna de cafés y pensamientos
Ya en el siglo XVII, el café se extendió a Europa, a través de las primeras comercializaciones en el cercano oriente por parte de los venecianos. Inglaterra fue el primer país que adoptó la moda de los cafés, y estos se convirtieron en espacios de desarrollo intelectual en el periodo de la ilustración, siendo la bebida predilecta de pensadores y científicos de la época. De hecho, para finales del siglo XVIII, el café ya había desplazado al té como la bebida oficial de los norteamericanos.
Una taza de café, una ventana al mundo
En la actualidad, la cultura del café se ha vuelto común en nuestro diario vivir, con una impresionante variedad de presentaciones, sabores y métodos de consumo disponibles en todo el mundo. Desde un humilde pastor de cabras que lo descubrió en el siglo 13, hasta las personas que comenzaron su elaboración y comercialización en la Península Arábiga en el siglo 16, el café ha recorrido un largo y fascinante camino.
Diferentes culturas, diferentes formas de disfrutar el café
No hay duda de que la cultura del café no es igual en todo el mundo. Cada país y comunidad presenta diferentes formas de prepararlo y saborearlo, lo cual enriquece aún más nuestra experiencia al disfrutar de una taza de esta bebida elixir. Aquí algunos ejemplos:
Los contrastes del café en Europa
En Grecia, tenemos el Ellinikos Kafe, que se hierve en un briki hecho de cobre o acero inoxidable. Mientras que en Egipto, es común que se sirva con cardamomo, y en Italia, cuna del espresso, se toma antes o después de las comidas. Por otro lado, en Malta, el café se toma con leche y se llama kafe maltez.
De España a Jamaica: el sabor del café
En España, encontramos el café con leche, el cortado y el café bombón, mientras que en Jamaica, el café Blue Mountain es considerado uno de los mejores del mundo. La versatilidad y diversidad del café es simplemente fascinante.
Cruce de océanos, cafés que inspiran
Continuando con nuestro recorrido global, encontramos en Turquía el café turco que se hierve en un cezve y se sirve después de las comidas. En Australia han creado el Flat white, un tipo de café con leche y espuma suave. También tenemos al café etíope como uno de los mejores del mundo y al café lechero de Brasil como el favorito de la región.
México: tradición e innovación en el café
En México, con una gran diversidad de formas de disfrutar el café, encontramos el café de olla, el americano, el capuchino y el carajillo. Todo un abanico de sabores y estilos que hacen aún más interesante la cultura del café en este país, que además es el quinto productor de café en el mundo.
El café como símbolo cultural y social
El café es una costumbre muy arraigada en todo el mundo y, en gran parte, es gracias a sus ricas y variadas representaciones y simbolismos. Desde las ceremonias del café en Etiopía hasta los cafés en las casas Ahwa de Egipto, cada rincón del mundo rinde tributo a esta bebida tan especial.
Una taza de café, un viaje por el mundo
Para finalizar nuestro recorrido, es importante destacar que más allá de los sabores y aromas, la cultura del café se nutre de una construcción social y cultural que trasciende fronteras y es parte fundamental de la vida cotidiana de millones de personas.
La próxima vez que disfrutes de una taza de café, recuerda que estás saboreando un pedacito de este fascinante viaje por el mundo y por la historia que esta deliciosa bebida tiene por ofrecer.
